No se si todos/as habreis tenido la ocasión de pilotar un helicóptero de juguete. Los más económicos suelen ser de baja calidad, sin equilibrio ni fuerza. Pero los más caritos también tienen sus inconvenientes. En este vídeo por lo visto la chica se ha pasado el modo de uso del aparato y nada más enchufarlo lo puso a volar. Se enojó de tal manera que tiro al suelo el transistor. Es entonces cuando saca a relucir sus increíbles botas. Unas botas de aguja, negras y altas. Poco hay para vestir más sexy. Sin embargo ella queria probar su resistencia, y se pone a pisotear el juguete como una loca, rompiendolo en mil pedazos.
Otro vídeo sobre esas extrañas costumbres de medir la resistencia de botas muy sexys con todo tipo de objetos: